La ola coreana
La repentina popularidad del soju, un vino de arroz coreano que nunca ha tenido tanta fama como el sake japonés indica que nos encontramos en la cresta de la llamada «ola coreana». Eso comenta la traductora Sora Kim–Russell (la traductora del coreano al inglés más famosa y, probablemente, más solicitada en la actualidad) para demostrar que la nueva ola coreana va de algo más que de películas y música pop.
«Sea obra del gobierno o una cuestión de suerte para la cultura, la literatura coreana recibe mucha más atención hoy en día», afirma la catedrática estadounidense de la Universidad Femenina Ewha de Seúl.
En una entrevista a Maclean’s Magazine, Sora Kim–Russell define Los planificadores como una lectura adictiva. El protagonista de la historia es Reseng, que se crio en una biblioteca, una biblioteca fundada durante el dominio colonial japonés sobre Corea y destinada desde sus inicios a ser lo que sigue siendo, una tapadera para un lugar «rebosante de asesinos a sueldo, mercenarios y cazarrecompensas». Abandonado en un cubo de basura cuando era un bebé hace 32 años, Reseng –cuyo peculiar nombre significa «próxima vida»– fue adoptado por el director de la biblioteca, un astuto contratista de asesinos llamado Viejo Mapache, y entrenado para convertirse en un asesino implacable.
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ResponderEliminar¡Hola! =)
Gracias por la reseña, pero este género no me va :P
Un besito ^^
¡Hola! No conocía tu blog. Me encanta que reseñes este libro, porque parece que la literatura surcoreana está pegando fuerte últimamente en el género thriller, un género que a mi me encanta. Hace poco descubrí a otro autos surcoreano en la lectura "El buen hijo" que te recomiendo porque me gustó mucho
ResponderEliminarBesos