Hueso de goma, de Carlos Jimenez Cuesta
Con este libro nos adentramos en el mundo del tecnocírculo, un sitio con bastantes peculiaridades, entre ellas las enfermedades que pueden tener sus personajes. En este caso nos encontramos ante Babá Hood, un chico que tiene una enfermedad un tanto rara síndrome del cartílago extendido, esta enfermedad lo que hace es que sus huesos no sean rígidos y por lo tanto parezcan de goma.
La historia nos cuenta la vida de Hueso, como se hace llamar, de cómo un día decidió que su propósito en la vida era ser un villano, no sabía cómo lo podría conseguir ni qué había que hacer para ello, pero ese era su sueño, ya que la vida no le había tratado bien y él quería vivir aventuras.
Al hacer esta reseña he echado de nuevo un vistazo al prólogo, porque antes de contarnos la vida de nuestro protagonista en el prólogo nos cuenta un suceso importante en este mundo, que no tiene mucho sentido hasta avanzada la historia, momento en el que encajan todas las piezas. Bueno, pues al empezar de nuevo la historia me he encontrado que comienza con esta frase:
—Tranquilo cariño, los niños son de goma.
Recuerdo que cuando lo leí al principio me parecía muy extraño el comportamiento de todo el mundo, la frase dicha así sin más, todo era extraño, sin sentido, y ahora que he vuelto después de conocer la historia me parece una frase sublime, creo que no habría mejor frase para esta historia.
¿Por qué me gusta este libro? Me parece un libro ligero, para leer entre libros más pesados, además creo que hay puntos de humor que hacen que veas lo absurdo de toda la historia. De hecho, creo que podría ser una historia para hacer un cómic (y lo dejo caer como idea, por si se quiere plantear el autor hacerlo).
A mi me ha conquistado con la historia, y estoy deseando leer más libros de tecnocírculo.
Saysa 
me gusta tu presentación de pocas letras saludos
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